La literatura y el cine han aportado a la profesión de detective privado un halo de misterio que está muy alejado de la realidad. La gente tiene una idea preconcebida de lo que es un detective privado, un estereotipo muy peliculero.
El investigador privado ha estudiado un grado universitario y una vez obtenido el título debe solicitar una licencia obligatoria para poder ejercer la profesión. Esta licencia la expide el Ministerio del Interior, Dirección General de la Policía y la Guardia Civil y se denominada TIP. En la actualidad hay unas 5.000 licencias, pero el número de detectives privados que realmente están ejerciendo ronda la mitad de esta cifra según datos ofrecidos por las asociaciones y colegios profesionales del sector.
El trabajo diario consiste en realizar vigilancias o seguimientos con el objeto de obtener información, redactar informes, editar los vídeos de las grabaciones que realizan y atender a la agencia y clientes. Seguimientos en coche, grabar a escondidas, guardias de diez horas…son rutinas en esta profesión.
Desgranemos los mitos existentes sobre los detectives privados:
Sobre los largos viajes por carretera y estancia en hoteles de poca monta, los detectives privados como cualquier persona, se alojarán en diferentes categorías de alojamientos según su personalidad.
Los disfraces, los detectives privados intentan pasar desapercibido y eso es más fácil de conseguir teniendo una apariencia de normalidad.
Los sobornos, Los detectives privados suelen dejar de realizar su labor si sospechan que el investigado los ha descubierto y casi la totalidad de los casos la persona ignora que ha sido objeto de una investigación hasta que se le comunica o en muchos casos no llegan a saberlo nunca.
Legalidad, los detectives privados son exigentes con el cumplimiento de la legalidad ya que su trabajo por un lado está supervisado por la dirección general de la policía y por otro lado por la justicia donde hacen valer sus informes
Sexo, alcohol y rock and roll, este mito también es falso, los detectives privados suelen tener horarios no programados y muchas veces tienen que salir de casa de repente para tratar de resolver un caso, además es una profesión donde la atención y la concentración es máxima lo que difícilmente casa con una vida desordenada.
Su vecina de al lado, tan normalita, puede ser detective privado.
AGENCIA DETTEC